¿Por qué es importante el transporte de cadena fría?

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Cadena fria

La cadena fría es un procedimiento de suministro con temperatura controlada para conservar las propiedades y calidad de mercancías durante su transportación. Requiere de condiciones de almacenamiento y logística específicas en todo momento para que no sufran ningún daño o deterioro.

Gracias a su uso, es posible transportar a largas distancias una gran variedad de productos como medicamentos, vacunas, sustancias químicas y alimentos (carnes, lácteos, etc.). Esto ha permitido expandir el comercio internacional para este tipo de mercancías, ya que sin esta tecnología podrían descomponerse durante el traslado.

¿Cómo funciona la cadena fría?

Para entender la importancia de la cadena fría, se debe conocer el procedimiento mediante el cual se realiza. Se divide en cinco fases en las que se deben tener consideraciones y cuidados específicos:

  1. Producción y tratamiento. Mientras se produce la mercancía se utilizan cámaras frigoríficas que permiten la manipulación del producto para conservar su temperatura estable durante todo el proceso. Además, su empaquetado debe ser hermético para conservar la refrigeración o congelación.
  2. Transportación. Consta de vehículos especiales que cuentan con refrigeración controlada, según el tipo de alimento o medicamento. Al momento de descargar y cargar se debe mantener la cadena de frío para no cambiar la temperatura de los productos.
  3. Almacenamiento. Tras ser exportada o trasladada nacionalmente, la mercancía llega a un almacén con cámaras frigoríficas y túneles de congelación con dispositivos de lectura y registro de variación de temperatura.
  4. Distribución. En esta etapa se transportan los productos desde el almacén a los distintos puntos de venta acordados para que lleguen al usuario final. Es importante que estos lugares cuenten también con las condiciones de refrigeración adecuadas.
  5. Venta al usuario final. El consumidor adquiere la mercancía exitosamente y queda en responsabilidad suya el conservarla de forma correcta.

Tipos de conservación en la cadena fría

Cada producto necesita una temperatura distinta para conservarse correctamente la cual no debe alterarse en ningún momento. Por ello, la temperatura de la mercancía se controla con base en los siguientes criterios:

  • Temperatura ambiente (hasta 20ºC). Se utiliza para sustancias que necesitan una ligera refrigeración.
  • Refrigeración (de 2ºC a 8ºC). Se usa para alimentos frescos con el fin de evitar la proliferación de bacterias y otros patógenos para la salud. También con medicamentos que requieren refrigeración.
  • Congelación (Hasta -20ºC). Se utiliza para productos congelados o que requieren temperaturas sumamente bajas, por ejemplo, algunas vacunas o materiales como la nieve carbónica (-70ºC)  y el nitrógeno líquido (-190ºC).

¿Qué pasa si se rompe la cadena fría?

La reducción de temperatura permite ralentizar o detener el metabolismo de los microorganismos para que no puedan reproducirse ni afectar a la mercancía. Si esta temperatura sube, se presentarán bacterias y patógenos que ya no será posible detener con la misma eficacia, aún si se vuelven a congelar.

En otros casos, si la temperatura se mantiene de forma constante y no hay presencia de patógenos, pero no es la adecuada, puede afectarse la calidad del producto y sus propiedades. Por esto, la cadena de frío debe ser medida en función de cada mercancía y no tener alteraciones, de lo contrario esta podría quedar inservible, lo que implicaría pérdidas.

En Movers nos especializamos en el transporte de cadena fría. Contamos con infraestructura propia gracias a nuestro socio comercial KUT que nos permite acelerar los procesos. Somos una agencia aduanal que se apega a la estricta normatividad de exportación e importación para que la mercancía llegue en tiempo y forma a su destino. Tenemos una gran variedad de servicios de alta calidad aquí.

Referencias:

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