En los procesos involucrados con el comercio exterior, puede haber modificaciones o adaptaciones. Esto se debe a que cada país tiene sus propias clasificaciones para los productos, incluyendo la fracción arancelaria. En caso de que se presenten cambios, se necesitará aplicar un salto arancelario para estar en concordancia con lo estipulado por otros países.
A continuación, te hablaremos sobre cómo funciona este procedimiento, en qué niveles se clasifica y cuál es su importancia.
¿Cuándo sucede el salto arancelario?
El salto arancelario es el cambio de fracción arancelaria que experimentan las mercancías. Esto sucede cuando se someten a un proceso de transformación suficiente para ser consideradas un producto distinto. También se presenta si la elaboración de materiales originarios o no originarios en un país participante en un tratado de libre comercio cambia su clasificación.
Además, se ejecuta al exportar o importar mercancías hacia un país que no está dentro de los tratados correspondientes. De igual forma, si las mercancías finales contienen materias primas originarias de otros países, puede haber una alteración en la fracción arancelaria.
Clasificación del salto arancelario
El salto arancelario puede alterar parcial o totalmente la fracción arancelaria. Por lo cual, se clasifica en niveles que son aplicables según el grado de transformación del producto:
- Cambio de 2 dígitos: Se modifica el capítulo, indicando un proceso de transformación menos elaborado. Es común encontrarlo en productos que aún comparten características estrechas con sus componentes.
- Cambio de 4 dígitos: Implica un cambio en la partida, ya que hay una transformación más substancial. Se aplica a productos con alteraciones significativas en su forma o uso.
- Cambio de 6 dígitos: Hay una modificación en la subpartida, lo que implica un cambio elaborado. Refleja productos sometidos a procesos productivos complejos que los distinguen de sus insumos.
¿Cuál es su importancia en el comercio exterior?
El salto arancelario es indispensable en el ámbito del comercio exterior, ya que permite mantener las mercancías en orden, según los requisitos de cada país. Sobre todo, ha obtenido gran relevancia con la implementación del Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Cuando hay alteraciones en la fracción arancelaria de las mercancías o materias primas que provienen de estos países, es importante tener una concordancia en las clasificaciones de cada nación. Incluso, esto facilita el otorgar preferencias arancelarias en los mercados de los países participantes en el tratado.
La correcta aplicación de estos conceptos permite a las empresas optimizar sus operaciones y aprovechar las oportunidades que brinda el comercio internacional. En Movers logramos que nuestros clientes entreguen sus mercancías en tiempo y forma. Si hay alguna modificación en la fracción arancelaria o algún otro requisito, nos aseguramos de que todo esté en regla.
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Referencias:
